Siguen las tardes de grande atletismo, en un Estadio Olímpico siempre repleto. Ayer, la competición más emocionante fue la final de los 100 m vallas, con la carrera más rápida de esta disciplina en la historia de los juegos. La australiana Sally Pearson, medalla de plata en Pekín 2008 y de oro en los Mundiales de Daegu 2011, ganó estableciendo un nuevo récord olímpico, 12.35. La medalla de plata la obtuvo la norteamericana Dawn Harper, oro en Pekín 2008, que fijó su récord personal, así como su compatriota Kellie Wells, que llegó tercera. Muchas emociones también en los 1.500 m con el argelino Taoufik Makhloufi que, aprovechando el derrumbe de los atletas kenianos, ganó el oro precediendo al norteamericano Leonel Manzano y al marroquí Abdalaati Iguider. Otras dos finales se disputaron dentro del Estadio Olímpico: en el lanzamiento de disco, el alemán Robert Harting, oro en los Mundiales de Daegu 2011 y en los Europeos de Helsinki 2012, concluye un año impresionante conquistando la medalla de oro con una marca de 68,27 m; en el salto de altura, el ruso Ivan Ukhov, oro en los Mundiales de Doha 2010, no encontró adversarios y ganó saltando 2,38 m.